WASHINGTON – Los senadores John Cornyn (R-TX), Marsha Blackburn (R-TN), Katie Britt (R-AL), Tommy Tuberville (R-AL), Cynthia Lummis (R-WY), Ted Budd (R-NC), Steve Daines (R-MT), y Cindy Hyde-Smith (R-MS) presentaron hoy una resolución conjunta de desaprobación bajo la Congressional Review Act para anular la ley del Presidente Biden Elusión de vías legales que pretende adoptar una línea dura contra la inmigración ilegal, pero que en realidad está plagada de excepciones y canaliza a los inmigrantes hacia programas ilegales de libertad condicional que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ha establecido sin el consentimiento del Congreso para permitir la entrada en Estados Unidos de más inmigrantes con solicitudes de asilo débiles o inexistentes:

“La norma de la administración Biden es un intento poco serio de resolver la crisis fronteriza y está llena de lagunas que los cárteles explotarán fácilmente para seguir trasladando migrantes ilegales a Estados Unidos y abrumar a nuestra Patrulla Fronteriza”, dijo el senador Cornyn.“En lugar de detener la inmigración ilegal, el presidente Biden está utilizando esta norma para canalizar a los inmigrantes hacia programas ilegales de libertad condicional, y esta resolución pondría fin a este juego de trileros para ocultar un nivel de inmigración ilegal sin precedentes.”

Antecedentes:

La norma de elusión de vías legales de la administración Biden entró en vigor el mismo día en que expiraba la orden de salud pública del Título 42 del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades, el 11 de mayo de 2023. Esta norma encauza a los inmigrantes por una de las tres vías “legales” siguientes:

• El programa de la administración para conceder la libertad condicional hasta a 30.000 venezolanos, haitianos, nicaragüenses y cubanos al mes, así como otros programas de libertad condicional que la administración ha creado o ampliado recientemente;
• La aplicación móvil “CBP One” de la administración, a través de la cual los inmigrantes pueden concertar citas para entrar en los puertos de entrada terrestres, donde se les puede conceder libertad condicional en el interior y autorizaciones de trabajo;
• Solicitar asilo en cualquier lugar o momento tras habérsele denegado en un tercer país.

Las dos primeras de estas tres vías constituyen un abuso de la autoridad del Secretario del DHS para conceder la libertad condicional, que según nuestra ley de inmigración sólo debe utilizarse caso por caso. Además, aunque la administración afirma ser dura con los inmigrantes que no optan por seguir las tres vías que ha creado, en realidad esta norma está llena de lagunas. Los inmigrantes ilegales y las organizaciones delictivas transnacionales que se aprovechan de ellos aprenderán rápidamente a explotar estas lagunas y desbordarán nuestros centros de detención cuando la Patrulla Fronteriza intente determinar si los inmigrantes entran en alguna de las numerosas excepciones. Esta norma no es un intento serio de resolver la crisis en la frontera sur, y no hace nada para disuadir a los migrantes de emigrar ilegalmente a Estados Unidos.